Preventivo y correctivo, para poder adelantarnos a futuros problemas y corregir desperfectos, asegurando un correcto funcionamiento a largo plazo. Con esta metodología el cliente podrá aumentar la vida útil de los equipos, ahorrar energía, evitar detención de trabajos por falta de servicio, ahorrar en costos de reparaciones.
El mantenimiento preventivo se basa en la implementación de tareas de limpieza de filtros, carga de gas, lubricación, y lo que fuere necesario para mantener en buen estado el equipo de aire acondicionado. También, se realiza un seguimiento exhaustivo de todos los parámetros y mediciones de presión, temperatura, voltaje, amperaje, entre otras.
SI pese a todo esto, hay fallas técnicas, se implementan tareas específicas de reparación, según las necesidades en cuestión.